¿Será esta la última vez que vemos a Tapia Fonseca? Solo el tiempo y las decisiones del buró político lo dirán, pero una cosa es segura: la Revolución sigue siendo un terreno fértil para debates… y para cambios de imagen.
En una reunión extraordinaria que dejó a más de uno con la boca abierta y el ceño fruncido, un delegado de base se levantó enérgicamente durante un encuentro del Sindicato Nacional de Trabajadores Azucareros, pidiendo la palabra para hacer una propuesta inusual: retirar a José Luis Tapia Fonseca de la foto de los líderes en la pared, alegando que no merecía estar al lado de los «grandes».
«Con el debido respeto a los presentes y a la sagrada imagen de nuestros próceres», comenzó el delegado con tono grave, «me parece un despropósito que el compañero Tapia Fonseca, que en mi modesta opinión no ha hecho ni la mitad de lo que hizo Fidel cuando cortó caña simbólicamente, esté en esta foto». Las miradas se cruzaron y el silencio fue interrumpido solo por un discreto carraspeo de alguien en la primera fila.
El polémico pedido: “Un hombre que no suda no debe estar aquí”
Con un gesto casi teatral que quedó recogido por un lente propiedad del Partido Comunista de Cuba, el delegado puso su mano y expresó:
«De aquí pa acá, está bien; de aquí pa acá, no» dijo, dejando a Tapia Fonseca fuera del resto de los presentes, todos flanqueados por los siempre venerados Fidel y Raúl Castro, y al omnipresente Díaz-Canel, quienes, con sus miradas desde lo alto de la sala, parecían presenciar el debate con cierto aire de desaprobación silenciosa, aunque uno ya está muerto; el otro está más muerto que vivo, y el tercero está muerto en vida.
El argumento central del delegado fue que «un hombre que no suda la camiseta del Partido y no ha cortado una caña en su vida» no debería compartir un lugar tan destacado en los retratos partidistas.
«No es un ataque personal», continuó, «pero comparemos trayectorias, ¡ni Fidel ni Raúl hubieran permitido esto!».
El debate sigue…
Aunque no hubo una votación inmediata sobre la propuesta, las miradas entre los asistentes dejaban claro que este tema dará mucho de qué hablar en las próximas asambleas, y que la imagen de José Luis Tapia Fonseca podría estar en riesgo de ser retirada… o al menos movida un poquito más hacia la esquina de la pared, donde la luz no llega tan bien.
Sin embargo, se tomó una decisión para calmar el álgido momento y fue esta: enviar a José Luis Tapia Fonseca a Roma, Italia, donde participará en el IV Foro Mundial de la Alimentación que desde el 14 y hasta el 18 de octubre se desarrolla en esa ciudad.
Tapia Fonseca fue incluso teletransportado a Italia, pues el día del debate, 12 de octubre, se encontraba en Cuba; y ya el 13 se encontraba en Italia, según dejó ver el diario Granma.
Al serle preguntado por este inusual, repentino y rápido viaje expresó:
«Parecemos que estamos allá, pero no; estamos aquí».