ETECSA anunció la creación de la “Red Nacional de Humo,” un proyecto inspirado en métodos de comunicación de tiempos remotos.
Ante las constantes quejas de los usuarios por la falta de cobertura y la lentitud del servicio, la empresa estatal de telecomunicaciones decidió innovar adoptando el ancestral sistema de señales de humo, bajo el lema: “Comunicación simple, libre de datos.”
MÁS NOTICIAS
Según declaraciones de la presidenta de ETECSA, Tania Velázquez Rodríguez, la red de humo es la solución “ecoamigable y adecuada para un país bloqueado como el nuestro, donde a veces es más fácil generar humo que señal de wifi.”
El sistema permitirá enviar mensajes breves mediante señales de humo que pueden ser divisadas a lo largo de 100 metros en días despejados.
¿Cómo funciona la red de humo?
Cada usuario recibirá un kit de “conexión”, que incluye un mechero, cuatro palos y un manual básico de señales de humo para principiantes.
Con este sistema, la empresa espera cubrir áreas remotas y descongestionar el tráfico en la red 4G, que “últimamente está más saturada que una parada de guaguas en Marianao.”
Las instrucciones indican que los usuarios podrán enviar hasta tres palabras por “mensaje de humo,” suficiente, según ETECSA, para frases como “sin luz”, “ven ya” y “trae comida.”
Reacciones del público y “ajustes” necesarios
A pesar de la sorpresa inicial, algunos ciudadanos parecen dispuestos a probar la nueva tecnología.
“Ya con tal de no tener que cargar 10 dólares de saldo para hablar 2 minutos, yo prendo lo que haya que prender,” comentó un usuario de Villa Clara.
Sin embargo, ETECSA ya ha advertido sobre algunos “problemas técnicos,” como el hecho de que los días de lluvia se suspenderá la red de humo.
“También pedimos a los usuarios que eviten mandar mensajes demasiado extensos, ya que el viento podría dispersar las palabras y causar interferencia en la comunicación,” explicó un vocero.
En redes sociales, usuarios han propuesto ideas para mejorar el servicio, sugiriendo que Etecsa venda “cigarrillos de humo largo” para mensajes más complejos o que distribuya abanicos oficiales para aumentar la distancia de transmisión.
Futuro de la “comunicación alternativa”
En un intento de ir un paso más allá, Tania Velázquez Rodríguez ha confirmado que ya están en fase de prueba los tambores de comunicación, un sistema en el que un equipo de ingenieros trabaja para “desarrollar ritmos únicos de cada mensaje y garantizar así una comunicación precisa”.
Por su parte, el Ministerio de Cultura ha aplaudido la idea y planea publicar un catálogo oficial de “sonidos autorizados” para evitar cualquier “transmisión disonante.”
Con humo en el aire y tambores en camino, la comunicación en Cuba parece estar lista para dar el paso hacia el siglo XXI… con los métodos del siglo XIX.