El CUP Soberano, la nueva moneda cubana, busca facilitar transacciones en tiendas vacías, reflejando la realidad económica del país y promoviendo la soberanía financiera.

La Habana – El gobierno cubano anunció la introducción de una nueva moneda: el «CUP Soberano». Esta divisa, que promete ser más resistente que el CUC, más flexible que el peso cubano y más ubicua que los «verdes» americanos, solo podrá ser utilizada en las cada vez más numerosas «tiendas vacías» del país.

El Banco Central de Cuba informó que el CUP Soberano tiene como objetivo facilitar las transacciones en establecimientos que se han quedado sin productos, garantizando que los ciudadanos puedan hacer cola, entrar a la tienda, y salir con la misma cantidad de productos que cuando entraron, pero con la satisfacción de haber participado en una experiencia económica de vanguardia.

El origen del CUP Soberano

«Este es un paso crucial hacia la soberanía económica total,» declaró el Ministerio de Economía en una rueda de prensa. «El CUP Soberano es una moneda que refleja nuestra realidad: no solo es un símbolo de nuestra independencia financiera, sino también de nuestra capacidad para adaptarnos a cualquier circunstancia, incluso la ausencia de bienes básicos.»

El diseño del CUP Soberano es un homenaje a la resistencia cubana, mostrando imágenes icónicas como la libreta de racionamiento, una cola interminable, y un carrito de supermercado vacío.

La moneda será emitida en denominaciones que van desde 0.001 hasta 1 CUP, lo que permitirá a los cubanos ajustar sus expectativas a la disponibilidad de productos en el mercado.

Cómo funciona el CUP Soberano

El Ministerio de Comercio Interior (MINCIN) explicó que el CUP Soberano se podrá utilizar en una red especial de tiendas que actualmente están «en proceso de reabastecimiento», lo que es un eufemismo para aquellas tiendas que no han visto un camión de suministro desde la época en que los dinosaurios aún vagaban por el Caribe.

«El objetivo es que los ciudadanos puedan continuar realizando sus actividades económicas sin la presión de tener que decidir entre productos,» comentó la directora de una de estas tiendas. «Ahora pueden venir, pasearse, mirar los estantes vacíos, hacer cola para pagar con sus Cupones Soberanos y salir con la misma sonrisa que tenían cuando llegaron.»

Los economistas señalaron que este sistema podría ser revolucionario.

«Es una economía circular en su forma más pura,» afirmó un profesor de la Universidad de La Habana que prefirió mantenerse en el anonimato. «La gente no necesita preocuparse por la inflación porque, con el Cupón Soberano, no hay nada que inflar.»

La respuesta de la población

Las reacciones en las calles son mixtas. Mientras algunos celebran la introducción del CUP Soberano como una muestra de ingenio revolucionario, otros expresaron su escepticismo.

«¿Qué voy a hacer con un CUP Soberano si no puedo comprar ni un paquete de galletas?» preguntó un ciudadano mientras hacía cola frente a una tienda vacía.

No obstante, muchos cubanos encontraron formas creativas de aprovechar la nueva moneda.

En redes sociales, ya circulan anuncios de «trueque» donde se ofrecen CUP Soberanos a cambio de favores como cargar el móvil o reservar un turno en la barbería.

«Al menos puedo decir que tengo algo en el bolsillo,» comentó un joven mientras mostraba orgullosamente un fajo de CUP Soberanos.

Una moneda para el futuro

Los expertos del gobierno aseguran que el CUP Soberano es solo el primer paso hacia una economía más autosuficiente y sostenible.

Se rumorea que están trabajando en un nuevo concepto de moneda, el «Peso de la Esperanza», que estará respaldado no por productos o servicios, sino por la esperanza de que, algún día, las tiendas se vuelvan a llenar.

Por ahora, el gobierno ha exhortado a la población a recibir con entusiasmo este nuevo símbolo de la soberanía cubana y a utilizarlo con responsabilidad.

«El CUP Soberano es más que una moneda, es una promesa,» concluyó el Ministerio de Economía. «Una promesa de que, pase lo que pase, siempre podremos contar con nuestra capacidad para inventar.»

Mientras tanto, los cubanos siguen esperando pacientemente en sus colas, con los Cupones Soberanos en la mano y el corazón lleno de esperanza, para el día en que puedan usarlos para algo más que comprar aire enlatado.