La legendaria cantante Omara Portuondo, de 93 años, sorprendió al público al anunciar su posible retiro, pero con una condición que ha dejado a todos perplejos: “me retiro cuando la Termoeléctrica de Felton funcione sin romperse”.
La diva del Buena Vista Social Club, famosa por su optimismo, explicó que su determinación está ligada a “un símbolo de estabilidad nacional”, sugiriendo que su retiro dependería de un “milagro energético”.
“Promesa a prueba de apagones”
Omara, conocida por su buen humor y su carrera incansable, agregó entre risas que “ya he visto de todo en este país, pero una Felton sin fallas sería una fantasía”.
Su comentario rápidamente se volvió viral, con usuarios en redes diciendo que, “si la Felton sigue rompiéndose, Omara podría cantar hasta el 2050”.
La idea de esperar a que la planta funcione de manera constante se ha interpretado como una apuesta con la paciencia de todo el país, que ya conoce la historia interminable de fallos de la termoeléctrica.
La Felton y Omara: dos iconos de resistencia
Para algunos, la promesa de Portuondo se ha convertido en un símbolo de la resiliencia cubana.
Un técnico de la Felton comentó en tono humorístico que la planta podría “tener problemas de por vida si eso significa que Omara sigue cantando”.
Por su parte, las autoridades aseguraron que están “comprometidas a hacer todo lo posible” para mejorar la planta, aunque nadie se atreve a prometer que algún día funcione sin contratiempos.
Reacciones del público
Las redes no tardaron en reaccionar con comentarios satíricos.
Un usuario bromeó: “¿Eso quiere decir que Omara es eterna?” mientras otro añadió: “Entre la Felton y Omara, la verdadera reliquia nacional es la paciencia del cubano”.
Incluso algunos sugieren hacer conciertos en las afueras de la Felton para “darle ánimos” a la planta a resistir un poco más, con Omara encabezando un recital de resistencia energética.
Así, el anuncio de la Portuondo ha dejado una pregunta en el aire: ¿logrará la Felton funcionar sin romperse?
Por ahora, todo apunta a que la diva seguirá en los escenarios, haciendo historia y burlándose con elegancia de la realidad cubana.